Esperando para mi primera sesión. (libre)

Entre a la habitación que me habían asignado para realizar mi primer análisis, mi primera terapia. Podía sentir como la emoción y la alegría invadía todo mi cuerpo. Aún no podía creer que me hubieran dado el trabajo con tan poca experiencia. Realmente mis notas y recomendaciones Universitarias habrían resultado de mucha ayuda. Mi esfuerzo se había visto recompensado y eso me lleno de orgullo.
Deje la caja en la que traía mis objetos personales sobre el escritorio de madera. Todo era perfecto, la iluminación proveniente del gran ventanal por el que se podía ver claramente el exterior. Cerca de la puerta de entrada había una mueble que sería perfecto para poner todos mis libros de investigación y estudio. Me gire y vi el gran sillón dónde me sentaría a escuchar. Fui rápidamente hacía él y me senté suavemente, se sentía genial. Me levante y comencé a acomodar cada cosa en su lugar. En menos de 30 minutos todo estaba terminado y listo para mi primer consulta.
Este día iba a ser perfecto nada podría arruinarlo.

Mire a la chica que se había detenido frente a la puerta y le sonreí, siempre me había resultado interesante los casos de bipolaridad. Me di cuenta que el problema era ese casi instantáneamente.
Pensé en lo complicado que sería para esta chica mantener una relación estable. Todo se complica con esos intensos cambios de humor. Realmente ¿se habría dado cuenta de la gravedad de su problema y que era algo más que la incompetencia de las personas que la rodeaban?. Me pregunté si podría conservar algún amigo o si estaría sola.
-Lo haré solo con una condición... - dije entendiendo que hoy que se encontraba en ese estado no podría averiguar mucho más.- Que mañana volverás a verme.. - concluí con una sonrisa.

Después de escucharla comprendí lo difícil que debió ser su vida. Yo tampoco había tenido el apoyo de mis padres por su muerte tan repentina ni siquiera mi tía y tutora se había preocupado por mi futuro.
Cuando la vi tomar la foto de mis padres conmigo de pequeña note en sus ojos una extrema tristeza. Recordé que esa foto nos la habíamos tomado días antes de sus accidente, no recordaba haberme vuelto a sentir tan feliz como en aquella vieja foto.
-Sí, soy yo aunque no lo parezca, creo que envejecí un poco- bromee para levantar el animo de la charla. No me gustaba el rumbo que estaba tomando.
-Te admiro mucho es increíble como sola pudiste llegar tan alto siendo tan joven, de verdad te felicito- dije sonriendo con amabilidad e intentando cambiar el rumbo de la conversación, no quería recordar momentos tan dolorosos para mi.